Aunque Joan Laporta asegura que las instituciones financieras comienzan otra vez a confiar en el Club Barcelona y que no necesitan vender a ningún jugador para cuadrar números, es probable que el próximo verano formalicen algún traspaso que les genere más margen y beneficios.
Por lo tanto, seguramente a partir de enero empiecen a analizar con más detalle qué futbolista o futbolistas son más imprescindibles para el Club y que su traspaso supondría un gran ingreso de dinero y no provocaría un cambio significativo en los resultados del juego.
¿Quiénes son los jugadores del FC Barcelona que están en la cuerda floja?
Ya Eduard Romeu, vicepresidente económico del Barça, en una rueda de prensa previa a la asamblea de socios compromisarios que se celebró el fin de semana pasado, se mostró optimista con el futuro de la entidad, sobre todo debido a que en el 2024 caducarán los contratos más elevados que el expresidente Josep Maria Bartomeu firmó a varios futbolistas.
Por lo tanto, la prioridad del Club sería dar salida a los capitanes para ahorrarse unos sueldos millonarios que les está perjudicando a nivel financiero.
De hecho, el contrato de Sergio Busquets finaliza en el 2023 y los de Gerard Piqué y Jordi Alba finalizan en el 2024. Y aunque parece que estos dos últimos futbolistas no tienen la intención de romper sus contratos para irse a otros equipos, el darles salida antes de tiempo, podría fortalecer al club.
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Por otro lado, ya en el verano hubo la opción de vender a Frenkie de Jong, pero su traspaso al Manchester United no se llevó a cabo porque el holandés no mostró intención alguna de negociar con ningún equipo y, porque tanto a Xavi como al presidente del Club no les gustaba la idea de desprenderse de él. Ahora bien, dependiendo de cómo acabe la temporada, es posible que en verano vuelva a abrirse su caso.
Lo que queda claro es que de cara al año que viene el Club blaugrana tendría que cerrar algún traspaso millonario para poder salir reforzado económicamente.
