Ibai Llanos es un hombre que suele tener éxito en aquellas empresas que se propone abordar, pero hay una en particular que se le resiste desde siempre, y no es otra cosa que perder peso.
El creador de contenido ha intentado adelgazar en varias ocasiones; sin embargo, nunca ha logrado su objetivo.
A finales del año pasado Ibai Llanos empezó a seguir un estilo de vida más sano. Cansado de su sobrepeso cambió su alimentación y comenzó a realizar ejercicio a diario. Incluso publicó un vídeo en su canal de YouTube en el que el ‘streamer’ mostraba cómo hacía ejercicio en el gimnasio que se hizo en su casa. “Llevo un mes sin fallar un día a entrenar, cuidando más mi alimentación y durmiendo con la mascarilla para no tener apneas del sueño. He cambiado totalmente mi vida. Mucho ánimo a los que buscáis un cambio. Se puede”, nos contaba Ibai. Y aquel cambio le supuso perder hasta 7 kilos en esos últimos meses del 2022.
Ibai Llanos y su búsqueda de pérdida de peso
Ibai Llanos lleva mucho tiempo intentando perder peso. De hecho, el famoso streamer español, había declarado en varias ocasiones que su objetivo era perder peso por dos motivos: la primera, por su salud, y la segunda para poder subirse al ring de La Velada del Año 4 con suficientes garantías de éxito. Sin embargo, este propósito está resultando más difícil de lo que se imaginaba.
Porque ya ha intentado adelgazar en varias ocasiones, pero nunca ha logrado alcanzar su objetivo. Es cierto que ha perdido peso (hasta 7 kilos en un primer momento), pero no es suficiente como para tener un físico que le permita estar bien consigo mismo, tanto mental como físicamente. Del mismo modo que nos mostró en un vídeo sus inicios, el pasado mes de marzo publico otra grabación en la que nos confesaba que estaba empezando a desmoralizarse y que, por ese motivo, había decidido contratar a un entrenador personal para salir de esa dinámica negativa.
Ibai Llanos explica cómo se motiva para perder peso
Ibai Llanos nos explicaba en su canal de YouTube lo que había hecho para volver a motivarse para perder peso:
“A estas alturas ya tocaría un vídeo del cambio físico, pero la realidad es que en estas últimas tres semanas he perdido la motivación… Empezamos con un proceso muy lento con el entrenador Valentín, en el que tuve una pequeña adaptación, salía a caminar, hacía pequeños ejercicios de fuerza… porque, como sabréis, cuando llevas muchos años parado, cuesta volver a coger el ritmo”, contaba Ibai cómo había sido su inicio en el proceso. “Después llegó el momento en que nos montaron el gimnasio en casa, y durante dos meses no fallé ni un sólo día. Lo combiné con el trabajo de una nutricionista que me ayudara con la alimentación para perder peso. Cada día me encontraba mejor e intentaba superarme… Cada mañana siempre encontraba el hueco para ir al gimnasio”.
Pero, según el propio Ibai, la cosa empezó a torcerse por varios motivos: “En estas últimas semanas han sido bastantes complicadas, siempre había algún debate, alguna discusión, que me hacía llegar al gimnasio sin motivación, sin afán de superarme. No me lo estaba pasando bien en el gimnasio y veía que no progresaba de la manera que yo esperaba. No he cumplido en estas semanas, hasta el punto de que en la alimentación no seguía los consejos y hacía lo que quería”.
Pero terminaba con un mensaje lleno de optimismo: “Lo más importante para mí es que no me pongo ninguna presión. Quiero cuidarme en mi día a día, tener una rutina saludable el resto de mi vida. No quiero perder 50 kilos en tres meses, ni ser el más fuerte del mundo… no pierdo el objetivo, no pierdo mis metas.
Os animo a todos los que buscáis un cambio físico, y que habéis tenido un parón de un mes, a que en ele momento en que tengáis fuerzas, volváis otra vez con vuestra rutina. Lo importante es tener la constancia suficiente para conseguir nuestros objetivos.
He vuelto a entrenar, estoy cuidándome más, pero el tema de la alimentación es lo que más me está costando. Como saludable, pero me cuesta tener la constancia. Quiero mejorar en este sentido. Quiero tener la rutina saludable en mi vida”.
Cambios en la alimentación y rutina de Ibai para perder peso
Ibai ha realizado varios cambios en su alimentación y en su rutina de vida para perder peso, con el objetivo de mejorar su salud y poder ser protagonista de La Velada del Año 4.
Es importante recordar que el progreso lleva tiempo y que pueden producirse contratiempos. Y sí, es completamente normal sentirse desmotivado de vez en cuando, ya que la motivación no es algo constante ni garantizado. El problema es cuando lo normal es estar sin ganas y poniendo excusas para no ir a entrenar.
Estar motivado depende de varios factores como el estrés, el trabajo, el cansancio, la dieta, la ausencia de progresos o las lesiones. Por lo tanto, cuando se entra en una de estas etapas es imprescindible no castigarse por sentirse desmotivado y tratar de tomar medidas para volver a entrenar.
Para conseguir no venirse abajo constantemente, existen varios métodos de eficacia probada que pueden ayudar a superar la desmotivación y mantenerse en el buen camino hacia los objetivos marcados:
- Establecer objetivos realistas: es fundamental fijarse objetivos razonables para mantener la motivación en el gimnasio. Es fácil desanimarse cuando no se ven los progresos esperados si se fijan objetivos inalcanzables. En lugar de eso, ponte metas que sean desafiantes pero factibles.
- Cambiar la rutina: realizar el mismo entrenamiento un día sí y otro también puede resultar aburrido. Para mantener las ganas de entrenar es recomendable variar la rutina. Incorpora nuevos ejercicios, prueba una nueva clase o cambia el orden de tu entrenamiento. De este modo, tu cuerpo se mantendrá alerta y evitarás caer en un estancamiento.
- Estar centrado en el proceso: El progreso lleva su tiempo y en el gimnasio es importante plantear los objetivos a largo plazo. En lugar de centrarte únicamente en el resultado final, intenta centrarte en el proceso de trabajo hacia tu objetivo. Disfruta de las pequeñas victorias, como ser capaz de levantar más peso o correr durante más tiempo sin parar.
- Consigue un compañero de entrenamiento: tener compañía en el entrenamiento puede ser una gran fuente de motivación. No sólo hace que hacer ejercicio sea más divertido, sino que también te ayuda a ser responsable y es más fácil cumplir con tu rutina. Puede hacer que el tiempo de entrenamiento pase volando y que el sufrimiento del esfuerzo físico no se note tanto.
