El pasado fin de semana se ha producido una redada a nivel nacional contra la presencia de menores en locales de apuestas deportivas, casinos, bingos y salones de juego.
Se trata de una operación iniciada por la Policía Nacional el jueves 26 de septiembre en la que los propietarios de varios locales que no han sido capaces de vetar la entrada de menores, podrían ser sancionados económicamente en los casos menos graves y hasta con la pérdida de la licencia en los casos más serios.
Los agentes coordinados por el Servicio de Control de Juegos de Azar y la Unidad Central de Delincuencia Organizada y Violenta, llegaron a distintos salones de juego, casino y apuestas deportivas de toda España, buscando infracciones que pudieran darse con especial atención a la presencia de menores de edad.
La acción policial llegó de manera simultánea buscando jugar con el factor sorpresa, lo que impide tomar medidas a aquellos infractores que son conscientes de las irregularidades que se están produciendo en sus negocios.
Además de la Policía Nacional, a la operación denominada “Arcade” se han sumado los cuerpos policiales autonómicos de Mossos de Esquadra y Policía Foral Navarra.
El objetivo es apartar definitivamente a los menores de las apuestas y el juego
La manera de proceder está consistiendo en acudir al mayor número de estas salas de juego e identificar a los clientes, especialmente a los que por su imagen puedan parecer susceptibles de no haber cumplido los 18 años de edad. En caso de encontrarse con algún cliente menor, se procederá a levantar acta para la correspondiente sanción que puede ser económica o administrativa para el negocio. Posteriormente se notificará a los padres o tutores legales de los menores de edad identificados. Los resultados de la operación se harán públicos el próximo 3 de octubre.
Con operaciones como esta se pretende transmitir a los responsables de los locales de la importancia de controlar que todo lo que suceda en el interior de los locales debe cumplir con la legalidad vigente.