El Ministro de Consumo Alberto Garzón ha vuelto a dejar bien claro que en octubre se aprobará la nueva ley de publicidad del juego.
Posible aprobación de la ley en octubre
Ante la incertidumbre en la que se estaban moviendo los distintos agentes afectados por la aun no aprobada ley, especialmente los clubes de fútbol que habían anunciado acuerdos de patrocinio con casas de apuestas, el Ministro ha sido tajante respecto a la aprobación de dicha ley.
Según Garzón, el Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos, además de otros grupos más reducidos, tiene la voluntad de sacar adelante la ley.
Si bien la situación en la que nos encontramos en España y en prácticamente todo el mundo podría ser un motivo para echar atrás las intenciones del Ministro de cara a priorizar otras cuestiones más prácticas, desde Consumo se amparan en el aumento del volumen jugado durante el confinamiento, que responde a la lógica de que muchísima más población buscó el ocio desde casa al no encontrarlo de otras maneras, y que por lo tanto la ley precisa de más atención que en circunstancias más normales.
Así lo ha respondido Garzón en una entrevista para el medio Radiocable cuando se le ha consultado sobre si es el momento ahora para tratar cuestiones a priori tan secundarias como la publicidad en las apuestas deportivas.
Uno de los puntos que más preocupan al Ministro y así lo ha recalcado en reiteradadas ocasiones, es que según consideran, la adicción a las apuestas y al juego en general afecta más a las personas de bajos recursos, y que por ese motivo los locales se sitúan de manera mayoritaria en los barrios más humildes.
La publicidad de apuestas en las equipaciones deportivas
De todas las restricciones que se aplicarían a la publicidad sobre el juego, la que más está dando que hablar es la que corresponde a los contratos de patrocinio en los que casas de apuestas lucen el nombre de su marca o su logotipo, en las camisetas de equipos de fútbol.
Se trata del sector prioritario en cuestión de marketing deportivo y practicamente todos los equipos de 1ª y 2ª división contemplan, o mejor dicho contemplaban, algún tipo de contrato con empresas como Betway, William Hill, Bwin o Betfair entre tantas otras.
El argumento de Garzón es que en el caso de los futbolistas principalmente, son referentes para los niños quienes podrían dejarse influenciar por la publicidad de las apuestas. Desde el sector no aceptan dicho argumento puesto que los niños del mismo modo que ven tomarse un vino a su padre, son sabedores de que hay actividades que son exclusivas para los mayores de edad y en muchos casos ni siquiera saben qué es eso que muestran sus ídolos.
Ante el anuncio de varios clubes de prolongar o empezar un patrocinio con una casa de apuestas para la próxima temporada, Alberto Garzón ha vuelto a asegurar que la ley entrará en vigor y los clubes deberán corregir esa situación suspendiendo el patrocinio y si procede buscar una alternativa, pero siempre ajena al juego.
En un tono ya más tenso, el Ministro ha amenazado a los clubes con las sanciones que se aplicarían en caso de que se apruebe la ley y se mantengan este tipo de patrocinios, que serán de tal cuantía que anularán la posible rentabilidad del acuerdo comercial.
El problema de esta nueva ley que afecta a tantas personas de manera directa e indirecta, es principalmente el momento en el que viene. Los clubes no encuentran patrocinadores solventes debido a la situación en la que nos encontramos, en la que las empresas son cautas en sus gastos. Las casas de apuestas además de solventes son demandantes de este tipo de publicidad, con lo que se solucionaba el problema que además sirve para sanear las endeudadas cuentas de los clubes.
