El fútbol italiano ha sido afectado por una ley similar a la que tanto ha dado de qué hablar en España, el Real Decreto de publicidad del juego, que entre otras cuestiones impide que los clubes deportivos hagan publicidad de operadores de juego online.
Los clubes italianos se ven ahogados
Según estimaciones de la Federación Italiana de Fútbol O Figc), los clubes italianos de fútbol habrían dejado de ingresar en torno a 1.100 millones de euros entre las temporada 2019-20 y 2020-21, por lo que ahora solicitan a su gobierno que suspenda esta prohibición puesto que perjudica las arcas de los clubes en un momento muy delicado como el que vivimos desde hace ya unos 18 meses.
La cantidad estimada que habrían perdido los clubes se segmenta en 244 millones derivados de patrocinios directos y actividades comerciales y 341 millones por ticketing, según cálculos de Sports Business.
España copió parte de esa norma
Italia llegó algo antes que España a esta norma, prohibiendo los patrocinios de casas de apuestas deportivas a principios del año 2019. Desde el año 2020 se está solicitando la revocación de la ley, o al menos en el aspecto que afecta a esta cuestión publicitaria puesto que resulta especialmente lesiva para los clubes.
Solicitud al gobierno italiano de suavizar su ley
La FIGC ha enviado un comunicado al gobierno italiano mediante el cual solicita una serie de medidas para apaciguar el daño sufrido por la ley, entre las que se incluye el aplazamiento durante al menos 2 años de los pagos adeudados, por impuestos tanto directos como indirectos, desde la puesta en vigor de la ley.
Los clubes también solicitan facilidades para poder optar a herramientas y ayudas orientadas a empresas en crisis, especialmente en materia fiscal con la conciliación de las deudas de éstos con la Agencia Tributaria.
También han mostrado su interés por una desgravación fiscal sobre los contratos a jóvenes jugadores en aprendizaje, además de su deseo porque el 1% de lo recaudado sobre las apuestas deportivas vaya a parar a un fondo que gestione la FIGC y que sirva para apoyar al fútbol profesional, amateur, femenino y juvenil.