La derrota en la jornada inicial contra Francia ha puesto cuesta arriba la clasificación de Alemania para los octavos de final, unido al buen papel que desempeñó Portugal y al buen juego que los lusos practicaron ante Hungría.
Joachim Low es casi seguro que podrá contar para este partido con el centrocampista del Bayern Múnich Leon Goretza, quien ha dejado atrás la lesión muscular que le impidió enfrentarse al cambinado francés y lleva toda la semana entrenando junto a sus compañeros.
Tal es la importancia que Low otorga a Goretza, que a pesar de que se lesionase con el Bayern Múnich, no dudó en convocarle para la Eurocopa. Su papel en el centro del campo le convierte en imprescindible, tanto con su equipo como en la selección.
Si se confirma el regreso de Goretza, se puede esperar un cambio en el mediocampo que no será Tony Kroos, un fijo indiscutible en los planes del técnico.
Entonces Gundogan, Gosens o Kimmich serían los candidatos, pudiendo descartarse a este último por su entrega y lo que aporta al ataque entrando por la derecha.
Otra posibilidad que baraja el técnico alemán es modificar el ataque dejando a Muller en el banquillo con Gundogan más adelantado y así Kroos haría dupla con Goretza más atrás.
Joachim Low encara este partido con las bajas de Klostermann y Hofmann.
Una victoria de Portugal supondría un nuevo fracaso para Alemania
Una derrota ante Portugal dejaría fuera a Alemania, una situación vivida en la última gran cita en el Mundial de Rusia, cuando los germanos no pasaron de la fase de grupos.
Pero Alemania es un equipo muy fuerte, de los más de Europa y sigue siendo candidata a ganar el título. Además, contra Francia supieron reaccionar ante el gol y hacerse con las riendas del partido a pesar de que no fueron capaces de materializar con goles el buen juego y las ocasiones.
Las casas de apuestas no dejan ninguna certeza sobre el partido, y es que Alemania parte como favorita pero no por una diferencia que les permita relajarse.